16.4.09

La estación abandonada de Principe Pío

Curiosamente, la antigua estación del Norte sigue en uso con su propósito original: estación de ferrocarril. Algo venida a menos, porque de ella sólo parten trenes de corto recorrido, aunque a cambio también es estación de metro y autobuses y un enorme centro comercial. Sin embargo, una parte de ella, quizá la más impresionante, se encuentra hasta la fecha en desuso.

La estación fue construida en 1861 por la desaparecida Compañía de los Caminos de Hierro del Norte de España. En un principio sólo dio servicio a la línea Madrid-El Escorial, que iría ampliandose con el tiempo hasta Irún. Posteriormente, en 1882, se inauguraron las instalaciones destinadas a viajeros. Sin embargo, el edificio principal, perpendicular a los andenes, no se construyó hasta 1928.

Tras la Guerra Civil la estación fue reconstruida de los daños ocasionados por los combates, esta vez de mano de la nueva compañía ferroviaria estatal: RENFE. Funcionó como estación secundaria de Madrid, por detrás de la de Atocha, hasta la construcción de la nueva estación de Chamartín en 1967, que tomó el relevo para todas las líneas de larga distancia, quedando relegada a estación de cercanías.

En la década de los 90 la estación fue cerrada definitivamente para sufrir la importante remodelación que la convertiría en lo que se puede ver hoy en día.

Sin embargo, el edificio del extremo siguió en el mismo estado que antaño. Los planes de reutilización hablan de convertirlo en espacio para las artes escénicas, aunque a día de hoy sigue cerrado y sin uso.

Precisamente ese edificio sin uso fue el que visitamos hace ya más de dos años. Por aquel entonces Abandonalia apenas era un pequeño blog donde colgaba algunas fotos de sitios abandonados y que no interesaba a casi nadie. Tampoco conocía a mucha gente que ahora se dedica a esto, así que me apunté a una “quedada” de Flickr para ver la estación por dentro.

Lo más divertido es que de una quedada que se preveía concurrida, al final aparecimos en el lugar de reunión cuatro gatos. En realidad, ni siquiera éramos cuatro. Sólo eramos una chica que había conocido no hace mucho en mi visita al matadero de Villaviciosa y que con el tiempo se ha convertido en compañera de abandonos y amiga. Así que viendo el plantel (o plantón, según se vea) decidimos probar suerte a ver que pasaba.

Por cierto, que por aquellos días estrenaba la réflex que aún hoy utilizo, y ni siquiera tenía un triste trípode por aquellas fechas. Hasta tiraba en modo automático casi todo el tiempo, de modo que una gran parte de las fotos salieron mal, ya sea movidas por la falta de luz o algo desenfocadas. Sin embargo, las que se salvaron, siguen siendo algunas de mis favoritas.

Entrar fue lo más fácil del mundo. Bastó con poner cara de “yo me paso la vida por aquí” y tener la suerte de que al puerta de la torre izquierda estaba abierta de par en par.

Aun así, resultó bastante inquietante por la cantidad de coches allí aparcados y unas oficinas de esas tipo contenedor situadas en la puerta. Cuando pasamos nosotros no había ni dios a la vista, así que fuimos bordeando la valla derecha como quien va a un coche y entramos por la puerta grande. Literalmente. Al pie de la torre oeste había una puerta abierta que conducía a la zona nueva de la estación, hasta unas escaleras metálicas de aspecto moderno,

A la derecha quedaba el vestíbulo principal de la estación. Al fondo vimos a alguien recogiendo cosas del suelo, aunque por la distancia era difícil saber que hacía exactamente, aunque por el aspecto no era un trabajador ni nadie de quien preocuparse.



Aún así nos dedicamos a explorar el edificio este. Escaleras arriba se conservaba aún un viejo ascensor de madera en bastante buen estado, de esos que se instalaban en los huecos de escalera de las casas antiguas. También encontramos otro ascensor, pero este más moderno y encastrado en las paredes del edificio. Como el de cualquier casa actual, vamos.




La mayoría de las habitaciones de la zona estaban forradas de madera y estaban en bastante mal estado. Apenas quedaba mobiliario alguno.

En la zona superior encontramos el acceso al tejado de la nueva estación. La estructura metálica era la que sujeta los nuevos tejados del metro y el área comercial.



Resultaba curioso ver por las ventanas las calles bulliciosas desde este sitio tan tranquilo…

Justo antes de esta zona encontramos la escalera a la cúpula este. Llevaba a una curiosa habitación diáfana pintada de azul con una escalera de caracol.



En la habitación azul encontramos la maquinaria de los viejos ascensores.

También se podía acceder a las terrazas, aunque nos habían comentado que no era buena idea asomarse mucho por allí, por lo que apenas nos asomamos un poco.

La escalera de caracol llegaba a la zona de la cúpula, con un curioso entramado de vigas de metal que la sujetaban y mantenían firme.

Tras explorar el edificio este bajamos de nuevo al vestíbulo de la estación. Esta vez estaba desierto salvo por alguna paloma huidiza.

El aspecto del vestíbulo principal es impresionante. Un espacio diáfano mayor que un campo de fútbol, de casi 4 plantas de altura coronado por una de esas viejas cubiertas de estación tan bonitas.

La parte este de la estación parecía dedicada al transporte de mercancías.


Había dos enormes montacargas capaces de bajar hasta un coche de buen tamaño, y cuatro montacargas más pequeños, además de unas cuantas básculas de las que sólo una conservaba una parte destrozada de la esfera.



En esta zona también había una taquilla pequeña, con cuatro ventanillas recortadas en la rejilla,a modo de jaula.



En el interior encontramos una pequeña caja fuerte que había sido forzada de muy mala manera, probablemente con un soplete.



Separadas por una valla a la altura de los montacargas pequeños se encotraba la zona de pasajeros, con una gran taquilla, una caseta de información hoy repleta de escombros y las escaleras de acceso a los andenes.

Lo más sorprendente de este lugar es ver que era una isla de soledad en un mar de gente. A cada momento so podía oír el ruido de los trenes, las sirenas, los ruidos y pasos de la gente que seguían su vida al otro lado de las ventanas de esta estación fantasma. Asomarse por la ventana y ver la nueva estación de cercanías, tan luminosa y limpia, mientras alrededor sólo hay polvo y desolación es una sensación única.



Con el sonido de los trenes y la gente no hacía falta mucha imaginación para poblar ese vestíbulo con fantasmas en ropas antiguas, en vueltos en abrigos largos con sombreros y gorras, arrastrando pesadas maletas de piel y consultando su reloj de cadena para ver cuanto quedaba para la salida de su tren, mientras en el otro lado de la sala los estibadores ferroviarios cargaban y facturaban mercancías. Luego volvías a la realidad y te encontrabas con el polvo, las heces de las palomas, la que entra por las altas ventanas y el apagado sonido de tus pasos.

Desde el vestíbulo se podía acceder al edificio oeste, a través de una ventana con una malla metálica rota y cruzando un patio de luces.

En esta zona se encontraban las oficinas. También muchas habitaciones de madera. Varios separadores de habitaciones eran de cristal, pero estaban destrozados… Daba un poco de miedo pasar por debajo de esos cristales afilados….
Las vistas del vestíbulo de la estación desde este edificio también eran de lo más impresionante.



Esta zona estaba en bastante mejor estado de conservación que la primera, probablemente porque no se ha utilizado en las obras de la nueva estación. Aún se encontraban papeles aquí y allá, e incluso algunas cintas de vídeo tiradas en un rincón. Los armarios empotrados, vacíos excepto por el polvo, aún se conservan bastante bien, junto con algún mobiliario metálico polvoriento.



En esta zona vivía o había vivido gente recientemente. Encontramos una mesa con velas y restos de comida y bebida. Las pintadas de las paredes hablaban de una especie de comuna, pero era difícil saber si esa noche habían dormido allí o no.



En los pisos superiores encontramos aún más oficinas, y esta vez con armarios, mesas y sillas arrumbadas.



Subiendo un piso más llegamos a la cúpula de la torre oeste. En esta habitación encontramos una enorme cantidad de documentación de RENFE que aún sigue allí. Miles de carpetas con documentos en estanterías y tirados por todo el lugar. El más antiguo que encontré era de 1968. El papel viejo tirado por doquier y las altas estanterías metálicas deban a la habitación el aspecto de la biblioteca de un loco furioso.



También en esta zona encontramos la maquinaria de los ascensores, aunque en este caso estaba mucho mejor conservada. Incluso había una lata de grasa por allí.

Una vez de vuelta en el vestíbulo nos aventuramos por las escaleras que comunicaban con los andenes. Había dos enormes ascensores varados para siempre en el fondo. Las escaleras tenían un aire elegante y majestuoso a pesar del tiempo, y el mármol y los azulejos que las decoraban aún aguantan el paso del tiempo.



Al final del primer tramo, a través de una ventana pudimos ver un enorme espacio vacío y oscuro. A una altura de unas dos o tres plantas más abajo se podía ver lo que parecía un tragaluz o algo parecido. En sus bordes se podía ver luz, por lo que pienso que debajo puede haber túneles o la estación del metro. El sitio parecía una enorme cueva artificial. Por cierto, que bendita linterna, que me permitió observar cada rincón

Más abajo estaban el acceso a los andenes, hoy tapiados. Al otro lado se encontraba la estación de cercanías hoy en uso.

A un lado de las escaleras principales alguien había tirado una pared de ladrillo de aspecto reciente. Al otro lado, en la más absoluta oscuridad, unas viejas escaleras que daban a un acceso tapiado y lleno de letreros viejos, muebles y polvo. Un almacén de deshechos. No había nada demasiado antiguo, sino que parece que usaron el lugar para quitar de en medio cosas de la nueva estación.

Encontramos otras dos escaleras, una dentro de las taquillas que llevaba a un par de habitaciones con una caja fuerte, un par de taquillas y unos viejos teléfonos, además de la basura habitual.

La otra, junto a los montacargas de los que hablaba al principio, llevaba a un muro tapiado tras bajar un par de pisos. Como cosa curiosa, encontramos un carrito de aluminio como los que se usan para llevar las cajas grandes de herramientas y unas cizallas de tamaño mediano nuevas… A saber que hacían allí.

Después de aquello tiramos para fuera y fin de la excursión. Al salir había un par de personas cargando una furgoneta… Nos miraron con cara rara (o al menos eso me pareció ver de reojo, aunque pudo ser paranoia), pero no dijeron nada.

Y esa fue toda la historia… Con que os haya gustado una décima parte de lo que a mi meterme en ese lugar varado en el tiempo me doy por satisfecho.

Enlaces:

- Google maps ofrece en Madrid su aplicación Street View, que nos permite hacer un recorrido virtual por las calles adyacentes a la estación.

- En la Wikipedia hay un completo artículo sobre la estación que he usado como referencia para la introducción histórica.

- Un artículo bastante completo sobre la estación, que incluye algunas fotos antiguas de la estación.


Salu2!

49 comentarios:

Anónimo dijo...

Gracias por recordarme esta visita...para mí, la más impresionante de todas las que he hecho!!!

Me quedo como tú, con la sesación de poder juntar actualidad con pasado...Creo que nunca antes (ni hoy por hoy) lo he llegado a sentir mejor que allí...

Y por supuesto, me quedo con la biblioteca del loco furioso...qué lugar!!!

Es genial que subas entradas pasados los años...se leen de otra manera, se sienten de otra manera...

Gracias compañero!!! ;)

La Churri.

Santanser dijo...

Hace poco descubrí este blog, por la misma afición a la busqueda del encanto que tienen los lugares abandonados, pero jamás se me ocurrio que pudierais visitar, esta, para mí, mítica estación. Pasé muchos años de pequeño correteando por esos halls, esperando que mis abuelos llegaran de Galicia. Casi había olvidado como era, pero gracias a este reportaje (en su momento intenté algo parecido pero me prohibieron el acceso por peligro de derrumbe) he conseguido recordar aquellos interiores de estación, en esencia francesa. Gracias. Y como siempre las fotos impresionantes!!!

Amio Cajander dijo...

yo he cogido el tren en la última década de vida de esa estación. Como, de niño fue la primera gran estación de tren que conocí... para mi... será siempre "la Estacion".

Me ha sorprendido reconocer aún espacios de tus fotos. Gracias!

Miguel Baquero dijo...

¡¡Joder!!, y pensar que yo he estado allí cuando era pequeño, de la mano de mi abuelo, y todo estaba lleno de actividad. Se me pone la carne de gallina. Este fin de semana, sin falta, me voy a dar una vuelta por allí

Anónimo dijo...

Tremendo trabajo, felicidades .
Impactante, además bien contado.
Mil besos.

Medussa dijo...

Me encanta la foto del ascensor
Un saludo

quique251 dijo...

Que triste resulta ver que trato reciben los edificios históricos en España. Ese edificio tendría que estar perfectamente conservado, para disfrute de todos, y no convertido en un centro comercial o similar... Un museo es lo que tendrían que poner en ese edificio.

marco dijo...

Que sitio más wapo, y pensar que miles de personas pasan al lado tooodos los días.

Más de uno se quedaría embobado y feliz de haber encontrado un sitio así, sobre todo al salir del trabajo.

marco dijo...

Por cierto, ¡que alguien menee esto! jeje

theiban dijo...

Buen documento. Es increíble que se condene al abandono edificios de este calibre.

CRISTINA dijo...

Sigo flipando con este blog recién descubierto para mí.
En este post, como en otros, las fotografías te atrapan, te captan nada ma´s entrar, pero es que después, el texto, no defrauda.
Me ha gustado mucho ese párrafo, en el que imaginas la estación con vida, ese que dice

"Con el sonido de los trenes y la gente no hacía falta mucha imaginación para poblar ese vestíbulo con fantasmas en ropas antiguas, en vueltos en abrigos largos con sombreros y gorras, arrastrando pesadas maletas de piel y consultando su reloj de cadena para ver cuanto quedaba para la salida de su tren, mientras en el otro lado de la sala los estibadores ferroviarios cargaban y facturaban mercancías. Luego volvías a la realidad y te encontrabas con el polvo, las heces de las palomas, la que entra por las altas ventanas y el apagado sonido de tus pasos."

Y en cuanto a las fotos, no sabría con cuál quedarme. La última de las escaleras es elegantísima. Y hay una con una perspectiva cónica preciosa, la número nueve. También me gusta mucho la del ascensor. Ah...y la número diez, la que muestra todo el vestíbulo y además parte de la foto es a través de una ventana.
Muy buenas fotos y buen post.

Saludos.

Perronaider dijo...

¡Bravo otra vez! Hace poco comentábamos un amigo y yo sobre esa parte del edificio ¿qué habrá dentro? ¿en qué condiciones estará? La fotografía que más me gusta es la del pié de los fantasmas. Este blog es grande.

Patricia Meseguer dijo...

Ainss, qué recuerdos!! Ahí cogía mi abuela todos los veranos el tren!! Y yo he ido de bien chiquituja, mi familia tiene un montón de anécdotas en esta estación. Lástima que esté y haya estado como está.
Como siempre, la entrada, impresionante, gracias por enseñárnos todos estos recovecos

El profeta Azul dijo...

cuando hagais una ruta por valencia o alrrededores avisarme que me apunto

Anónimo dijo...

Qué fotografías......

Anónimo dijo...

hello... hapi blogging... have a nice day! just visiting here....

horra!horra! dijo...

Muchísimas gracias por tener este blog! Una pasada los sitios que encuentras, y las fotos!

Cris dijo...

Puede que esta serie te guste

http://www.flickr.com/photos/blopsmen/sets/72157606502123223/

Anónimo dijo...

Insisto. Si la mina gótica ha sido una experiencia maravillosa. El que hayas hecho realidad mi esperanza de que tuvieras fotos de Príncipe Pío ya ni te cuento. Hace muchos años que me pregunto como estaría por dentro. Y todos esos papeles por el suelo... Menos mal que no me atrevo a entrar porque ya me veo empapelando la casa con horarios de trenes.
Las fotos son impresionantes. Nunca cambies de cámara.
Felicidades, es un gran trabajo.

Anónimo dijo...

Perdonad, es facil entrar, porque dentro de dos domingos vyo a ire a madrid pro temas familiares y igual me paso para acerme algunas fotos.
gracias

Lugares Abandonados dijo...

Me encanta tu blog, soy LAYONER de lugares-desconocidos.blogsopt.com me gustaria aparecer en abandonalinks para dar a conocer mas mi pagina blog, gracias.
un saludo
LAYO

Anónimo dijo...

Hola soy de la web "Zeoc.jimdo.com" me gustaria hacerte unas preguntas asi te publico en mi web por que he observado que tienes un blog maravilloso y una gran habilidad para fotografiar. a veces leo algunas notas y esas fotos son tan penetrantes !!! bueno si quieres contestar aqui estan las preguntas :

1.Desde hace cuanto tiempo haces esto de fotografiar
lugares abandonados?

2.Como te tomas esto? como un pasatiempo?

3.No te da miedo entrar a esos lugares?

4.Alguna vez te pescaron entrando a una lugar donde no se podia?

5.Como es que contactas los dueños de los lugares que visitas? o te metes en estos lugares de colado??

6.Mencionanos las 3 mejores visitas que hiciste. y por que son las mejores??

Buenos Muchas Gracias
Envia las respuestas a : Zeocgames@gmail.com

Anónimo dijo...

Your blog keeps getting better and better! Your older articles are not as good as newer ones you have a lot more creativity and originality now keep it up!

maria dijo...

gracias por recordarme mi infancia, me crie en esa estacion tan bonita pues vivia enfrente, jugaba alli con mis amigas y subiamos y bajabamos en ese monacargas que tenia un ascensoriata que le daba a una manivela redonda para que subiera y bajara, era nuestro juguete, tambien nos pesabamos en las basculoas que eran para pesar los paquetes que se enviaban. una preciosidad de estacion cuando la cerraron me hicieron llorar, es una pena que esa parte de arriba la tengan tan abandonada, deberian restaurarla ya que no hacen nada. gracias por esas fotos.

ESTACION PROVINCIAL MERIDIANO V dijo...

En Argentina habia tambien una Estacion abandonada y los vecinos la transformaron en Centro Cultural
www.estacionprovincial.com.ar

Nohelia dijo...

Hola me encantaria, hacer una visita, iriamos un amigo y yo y el que se quiera apuntar... quien se apunta??? escribanme al mail

Anónimo dijo...

Me encantaria hacer una visita, quiero ir con un amigo... quien mas se apuntaria???

Anónimo dijo...

Hemos pensado unos amigos y yo, en visitar este lugar, sinceramente es bastante fotogénico.

Espero que no haya problemas para entrar, y por cierto..Buenísimo el reportaje ;)

¡Un saludo!


Visita mi blog:
http://leonk-vidabohemia.blogspot.com/

Anónimo dijo...

en la busqueda de imagenes para trabajos de la facultad me encotre con este blog, que de verdad es fantastico, las imagenes son geniles y los textos tambien, la verdad gracias por poner contenido tan provechoso y estupendo.
saludos

Javier dijo...

Me encanta el artículo, muy literario y descriptivo. Y las fotos también, son buenísimas. Parecen cuadros.

¡Qué envidia! A mí me echaría un poco para atrás pasear por un sitio así...

Un saludo.

Andres dijo...

Excelente el blog!!!
Saludosss

Nicolas dijo...

Felicitaciones pior el blog!!
Se lo han curradoo!
Saludoss

Anónimo dijo...

ola , espero que aunque ha pasado unos añitos desde que se publico esta entrada algien me pueda contestar.
Me encanta tanto a mi como a mi grupo de amigos visitar lugares abandonados e incluso para hacerlo mas " magico " digamoslo asi nos gusta visitarlos por la noche .
Hoy en el 2011 e visto esta entrada y la estoy muy interesada en saber mas de esta estacion y de si podriamos entrar por la noche a verla en algun momento.
Un saludo

liquidacion de sueldos dijo...

Lo que seria todo acondicionado

ramses dijo...

La estacion me trae muy buenos recuerdos cuando era niño, ya que iba a medina del campo con mi madre.Todavia recuerdo cuando me subi con mi abuela en uno de los ascensores o quiza era el enorme montacargas. me encantan los edificios antiguos la historia el hacer proyecciones a una vida pasada en la estacion .... Maravilloso... y a continuar explorando Gracias a todos

Anónimo dijo...

Hola a mi me encantaria entrar de nuevo una noche y aventurarnos es una experiencia

Unknown dijo...

Qué fotos tan bonitas. He llegado por el enlace de El País de rebote.
Prefiero que se 'siga deteriorando' poco a poco (todo depende de lo que la destrocen los que entran) que verla convertida en algo parecido a la infografía de JB que aparece en el artículo del periódico que antes indicado me ha llevado hasta aquí.

Unos 11 o 12 años tendría la última vez que recuerdo haber estado dentro... jejeje. Es preciosa.


Anónimo dijo...

Trabajé varios años en la estación. Los torreones se denominaban "de levante" y "de poniente". El ascensor de madera daba acceso a las oficinas de las plantas superiores y el empotrado solo lo usaban los jefazos. Las escaleras de caracol, si están en la bóveda del torreón de poniente, son las del archivo y facilitaban el acceso a otro nivel de estanterías con expedientes.

Me produce una gran tristeza ver en qué estado se encuentra esa parte de la estación, siempre ha sido mi predilecta y su actual deterioro no se corresponde con los bonitos recuerdos que conservo de "mi estación" en la década de los ochenta.

Anónimo dijo...

Es un sufrimiento ver la estación que de niño me acogía para ir Asturias todos los veranos. Acompañaba a mi padre a facturar las maletas, y mi madre, muchas tardes, a ver los trenes de entonces, que eran los bonitos. Cuando metan mano al vestíbulo lo van a arrasar. En cualquier país culto se habría convertido en museo ferroviario junto a Delicias que se ha quedado pequeño.

Unknown dijo...

Hola. Después de leer el articulo sobre la estación de Príncipe Pio en este blog intenté visitarla por mi cuenta pero no tuve suerte. Después de varios intentos por buscar una entrada y por temor a que me pillaran, justo cuando quise entrar, encontré una puerta abierta pero había un grupo de personas dentro y decidí irme. Al volver más tarde, todas las puertas estaban cerradas pero escuché una conversación entre dos personas y parece que se esta pensando restaurar la estación y convertirla en un centro comercial. La inversión sería millonaria. Como muchos decís, sería una pena que estoa acabara así porque tendrían que limpiarla, restaurarla y convertirla en museo por toda la historia que tiene que contar. Esperaremos noticias del futuro que le depara.

Anónimo dijo...

Yo la conocí a final de 1956 y desde entonces, siempre fue mi estación preferida. Soy un maquinista jubilado que toda su vida ha estado unida a esta bellísima estación. De hecho viví en el mismo Paseo de la Florida y me casé en la Ermita de San Antonio de la Florida, así que hablo con conocimiento de causa. En esa estación han salido los mejores maquinistas de Locomotoras Eléctricas de la Renfe del siglo pasado, por lo menos eso se decía en toda España y verla ahora, con su hermoso Centro Comercial, a los que la hemos disfrutado tanto, nos coge de sorpresa. De hecho, yo que paso con frecuencia por ella, cuando estoy dentro, veo las 6 vías principales que eran los andenes principales con su hermoso reloj, arriba y enfrente, como si el tiempo no hubiese pasado. ¡Cuántas cosas nos han pasado en esos andenes!¡Cuántas vivencias! Cuantos compañeros desaparecidos....
Es verdad que la parte superior, que era preciosa y es la que se ve en este correo, está de pena. Parece mentira que ningún organismo sea capaz de repararla y darle algún sentido a este hermoso edificio. Se ve que lo viejo ya no vale y ahí también incluyo a las personas....Ginés.

Iona Seligman dijo...

Muchisimas gracias de las fotos - que encanto! alguien sabe si ADIF le habia puesto a la venta en cualquier momento?

Colorella dijo...

Hola, qué tal?

Estoy haciendo mi trabajo final de máster de jardinería y paisajismo, y mi intención es proponer un jardín tropical (algo parecido a lo de Atocha) en esta estación. Lamentandolo mucho a mi no se me ha hecho tan sencillo entrar, he tenido problemas para conseguir información y demás cosas con la gente de Adif. Entonces quería saber si existe la posibilidad de que compartas estas fotos conmigo y así me ayudes un poco con mi trabajo. Puedes ponerle una marca de agua en algún lugar (por favor, no en el centro) y yo te daré los derechos de autor en todo momento. Si quieres hablar mejor, mi correo es prey27@gmail.com. Muchas gracias y qué hermoso tu blog!

Unknown dijo...

Hola! Hace tiempo que descubrí este blog, me encantan las entradas, siempre me han parecido fascinantes los lugares abandonados.
Quería preguntarte si habías hecho alguna de estas visitas al antiguo estadio abandonado de frontónBeti Jai en MAdrid, está en el barrio de Chamberí. Me parece un espacio interesante como lugar abandonado.

fdfss dijo...

Mensaje para el administrador de esta página. Pongase en contacto conmigo por favor. Tengo algunas cosas que decirle que le interesaran sin lugar a dudas. Mi correo. akulaagr@yahoo.es

fdfss dijo...

Mensaje para el administrador de esta página. Pongase en contacto conmigo por favor. Tengo algunas cosas que decirle que le interesaran sin lugar a dudas. Mi correo. akulaagr@yahoo.es

Unknown dijo...

Hola! Estoy haciendo como trabajo de fin de carrera una propuesta de rehabilitación de la estación, hay poca información en Internet y en la fotos no distingo muy bien el material del suelo de la nave central, si puedes darme alguna información te lo agradecería.
Un saludo

Anónimo dijo...

Esta totalmente abandonado y puede entrar cualquiera o hay alguien haciendo un control de la gente que entra y sale. Es urgente
Gracias

Unknown dijo...

Es como si hubiera entrado con ustedes,muy bien descrito.